Águeda Fuentes-Guerra Toral, Elisa Martín-Arévalo y Carlos González García
Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento, Universidad de Granada, España
La percepción y la acción son procesos complementarios y además íntimamente relacionados entre sí: interactuamos con el medio partiendo de la información que recabamos a través de nuestros sentidos y dicha información la utilizamos para guiar nuestras acciones. En este contexto surge la Teoría de Codificación de Eventos, cuyo objetivo es precisamente describir la relación entre percepción y acción. Contribuye así a explicar la representación cognitiva de diversos fenómenos cotidianos, como lanzar una manzana al aire o distinguir entre una manzana y un tomate a la hora de cocinar un plato.