Mario Sainz (a,b) y Rocío Martínez (a)
(a) Dept. de Psicología Social y Metodología de las Ciencias del Comportamiento, Facultad de Psicología, Universidad de Granada, España
(b) Dept. de Psicología, Universidad de Monterrey, México
El incremento de la desigualdad económica tiene graves consecuencias en las relaciones intergrupales e interpersonales. Diferentes estudios han mostrado que la brecha económica entre personas de clase baja y alta favorece la deshumanización de los grupos que se encuentran en los extremos de la jerarquía social. En el presente artículo se revisan los trabajos recientes que han permitido identificar la animalización de los grupos de clase baja, así como la mecanización de la clase alta.