María Jesús Maraver (a) y Carlos J. Gómez-Ariza (b)
(a) Dpto. de Psicología Experimental y Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento, Universidad de Granada, España
(b) Dpto. de Psicología, Universidad de Jaén, España
Al igual que un controlador aéreo regula el funcionamiento de un ajetreado aeropuerto, las funciones ejecutivas son el sistema de control de nuestro comportamiento, permitiéndonos planificar y regular nuestras acciones (motoras o cognitivas), realizar múltiples tareas y recordar sólo aquella información que es relevante. Teniendo en cuenta su importancia, han sido muchos los intentos de demostrar si las funciones ejecutivas se pueden entrenar. En nuestro trabajo investigamos el efecto de dos tipos de entrenamiento de las funciones ejecutivas y demostramos que sí es posible mejorarlas. Además, comprobamos que una mayor motivación durante el entrenamiento está asociada a mayores mejoras.